La guardia civil en el momento del rescate de los animales
La Guardia civil ha desarticulado una organización criminal dedicada al robo de galgos de competición y al amaño de las competiciones donde participan estos desdichados animales. Los detenidos han sido acusados de manipulación de competiciones, maltrato animal, falsedad documental y robo.
Hay 8 detenidos y otros 29 imputados en Sevilla, Jaén, Badajoz, Madrid y Toledo. El cabecilla era un vecino de Sevilla, con antecedentes penales por el mismo motivo, que se encargaba de señalar los galgos a robar. Otra parte del grupo se encargaba de la ejecución del robo y otros de esconder al animal y practicarle el cambio de microchip.
La denuncia partió de la Federación española de galgos, que identificó al animal en uno de los controles de ADN que suele realizar antes de las competiciones. El ADN coincidía con el de un animal llamado CHAPAPOTE, sin embargo en el microchip figuraba otro propietario y otro nombre: LITRI.
La banda robaba a los galgos para utilizarlos como sementales, cobrando por cada monta entre 600 y 1000 euros. Los que solicitaban la monta eran conocedores de la identidad real del animal, y por o tanto serán también imputados. Un galgo puede realizar unas 30 montas al año, obteniéndose de cada una de ellas entre 7 y 10 cachorros. La Guardia civil calcula que CHAPAPOTE pudo tener desde que fue robado, en 2008, al menos 840 cachorros, valorados en mas de 300.000 euros.
La Guardia Civil afirma que pueden existir cientos de casos, e indica que se continúa con la investigación para saber el paradero o destino de todos los robados.
Cuando CHAPAPOTE fue localizado vivía en condiciones lamentables e insalubres junto a otros galgos, y estaba agazapado en un contenedor de basura volcado, el que fue su hogar durante estos 4 años.
Desde SAVETHEDOGS queremos señalar que nos alegramos de que este tipo de delitos sean perseguidos, aclarados y que los animales secuestrados sean liberados. Pero de igual forma queremos señalar que la propia competición de carreras de galgos constituye un fragante delito de maltrato animal, en el que las prácticas crueles son habituales: violencia, dopaje, etc. Es habitual, y por todos conocido y consentido, que estos animales sean sometidos a prácticas estresantes y de inanición.
Por lo tanto resulta indignante como se persiguen estos delitos en los que hay mucho dinero invertido y muchos intereses comerciales en juego, y como se abandonan a su suerte a miles de galgos que en todos los pueblos de España son maltratados y asesinados sin que la Guardia Civil ni las autoridades intervengan con la determinación mostrada en este caso.
La justicia no es igual ni siquiera para los galgos y si en España caminamos hacia un modelo en el que la justicia será para el que se la pueda pagar, en el caso de los galgos también podemos afirmar aquello de... GALGO RICO, GALGO POBRE.
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